"A la muerte física, los verdugos agregaron la segunda muerte del olvido y el anonimato" Luis Sepúlveda.
viernes, 30 de marzo de 2012
Derechos Humanos
DESAPARECIDOS: NUEVOS DATOS, NUEVAS EXCAVACIONES
Informantes dieron datos de otros enterramientos
LA EXPECTATIVA ES EXTENDER LAS EXCAVACIONES HACIA OTROS CENTROS DE
DETENCIÓN
(Últimas Noticias)
El equipo de antropólogos que dirige José López Mazz trabaja sobre
nuevos datos que indican otros enterramientos en predios militares. Se
prevé que este año haya excavaciones en otros centros de detención.
"Tenemos muchas pistas de muchas cosas. Seguimos atrás de varias
pistas, muchísimas y en más de un lugar" de detención, expresó la
coordinadora ejecutiva de la Secretaría de Seguimiento de la
Comisión para la Paz, Graciela Jorge, a Ultimas Noticias.
Con esto hizo referencia a la búsqueda de restos de desaparecidos
durante el periodo dictatorial (1973-1985) que lleva adelante la
Secretaría junto al equipo de antropólogos liderado por José López
Mazz, quienes trabajan en conjunto con el grupo de historiadores
encabezado por Álvaro Rico.
Si bien la Secretaría está abocada a confirmar a quién pertenecen
los restos hallados a mediados de marzo en el Batallón 14, hay nuevas
pistas "firmes" sobre la posible existencia de más cuerpos en dicho
predio. Asimismo, se ampliaron las investigaciones hacia otros
batallones, según explicaron fuentes de la investigación a Ultimas
Noticias.
En tanto, Jorge confirmó al matutino que "en cierta forma hubo
alguien que indicó donde estaba el último hallazgo" y aseguró que
se continúan recibiendo datos de informantes confidenciales. Si bien
no se puede determinar cuántas personas colaboran con la secretaría
actualmente, se reciben testimonios, así como documentos enviados en
forma anónima, por lo que hay un tráfico de información activa.
Esto generó que en los últimos meses se empiecen a manejar nuevos
territorios para realizar excavaciones, lo que será confirmado luego
que se culminen con los trabajos en el Batallón 14, ya que es el foco
de atención del equipo en este momento.
Si bien Jorge indicó que no se puede hablar de fechas porque pueden
surgir cosas nuevas en los próximos meses, estableció que este año
es probable que el grupo de antropólogos concentre su trabajo en
otros predios en busca de nuevos restos óseos.
Por otra parte, la coordinadora ejecutiva expresó que "evidentemente
(el Batallón 14) es un cementerio clandestino, pero no podemos
asegurar cuántas personas hay. Si ya encontramos a dos muy cercanos
allí, quiere decir que ahí los enterraban, pero no podemos saber la
cantidad y si hay más". En tanto, consideró que hay que manejar el
tema con "cautela", debido a la sensibilidad del caso.
Por otra parte, aseguró que el hallazgo de nuevos restos "a veces
parece un poco milagroso o asunto de suerte, pero son cosas muy
trabajadas. Un poco de suerte necesitamos pero el 98% es trabajo,
chequeo de datos, verificaciones, fotos aéreas, hay de todo".
La prescripción de los delitos cometidos en dictadura, la aparición
de los restos de Julio Castro y la relevancia que tomó el tema
derechos humanos en 2011 fueron factores que incrementaron la cantidad
de personas dispuestas a brindar información. Esto generó que el
equipo de antropólogos pueda avanzar más en sus investigaciones,
aunque Jorge explicó que cada informante confidencial que aporta
datos implica que luego la Secretaría deba realizar "un chequeo y un
trabajo inimaginable para verificar, ver, comprobar y luego actuar" en
el caso de los enterramientos.
Estudiarán pequeños huesos hallados en Batallón 14
Presidencia enviará nuevos restos óseos a analizar a laboratorios
argentinos en los próximos meses. Se trata de la segunda tanda de un
conjunto de "pequeñísimos restos óseos" que fueron hallados en
excavaciones del Batallón 14 de Paracaidistas de Canelones. La nueva
medida fue confirmada por la coordinadora ejecutiva de la Secretaría
de Seguimiento de la Comisión para la Paz, Graciela Jorge, a Ultimas
Noticias.
Como consignó en agosto pasado este matutino, continúan pendientes
de estudio numerosos fragmentos de huesos que fueron hallados por el
equipo de antropólogos liderado por José López Mazz en el segundo
semestre del 2011.
La primera tanda fue enviada ese mes, aunque hasta el momento no hubo
respuesta sobre el origen de estos restos, ya que aún están siendo
analizados. Se trata de trozos tan pequeños que a simple vista no ha
podido determinarse si son de origen humano o animal.
Jorge explicó que "lo primero es descartar si son humanos", y en caso
de que sí lo sean, se realizarán los correspondientes estudios de
ADN para identificar si pertenecen a desaparecidos en dictadura.
Ante estos hallazgos, el equipo de antropólogos tuvo que elaborar un
protocolo para estudiarlos, debido a que su tamaño es de menos de un
centímetro, lo que dificulta más la tarea de documentación. Por lo
tanto, el procedimiento implicó tomar fotos a cada pieza,
inventariarlos y numerarlos.
El primer hallazgo de estos pequeños restos fue el 3 de agosto,
según informó en aquel entonces el secretario de Presidencia,
Alberto Breccia, a Ultimas Noticias y los meses siguientes se hallaron
más restos de similares características. Este hecho fue la antesala
a la aparición del cuerpo del maestro Julio Castro, hallado en
octubre del año pasado e identificado en diciembre, seguido por la
aparición de nuevos restos a mediados de marzo que no han sido
identificados aún. Si bien hasta el momento desde Presidencia no se
quiere precipitar en hipótesis, el hecho de que se hallaran huesos
pertenecientes a dos personas inclina las especulaciones de los
antropólogos a que estos pequeños restos puedan también ser
humanos.
Consulta a Chile por los desaparecidos
Uruguay inició contactos con la Justicia chilena y organizaciones de
derechos humanos para obtener información acerca de alrededor de
veinte desaparecidos en dictadura en territorio chileno. La
Secretaría de Seguimiento de la Comisión para la Paz tramita hace
varios meses información referente a una veintena de casos de
desaparecidos que fueron reconocidos como tales en Chile, durante la
dictadura uruguaya (1973 - 1985).
Según informó la coordinadora ejecutiva de dicha secretaría,
Graciela Jorge, a Ultimas Noticias, con este contacto se busca obtener
testimonios y datos que permitan avanzar sobre el paradero de
uruguayos que fueron detenidos en Chile en el marco de la cooperación
que existía entre las dictaduras latinoamericanas.
Por lo tanto, numerosas organizaciones chilenas trabajan para recabar
los datos, así como a nivel gubernamental se solicitó información
de la antigua "Comisión para la verdad y la reconciliación", similar
a la Comisión para la Paz en Uruguay.
Uno de los casos referentes fue el hallazgo de los restos de la
uruguaya y militante del Partido Comunista, Mónica Benarroyo,
desaparecida en Chile en 1973, cuyos restos fueron hallados en 2010,
repatriados y sepultados en Uruguay por su familia. Si bien Chile
avanzó en forma significativa en materia de derechos humanos durante
el periodo de la presidenta Michelle Bachelet, tras la asunción del
actual presidente, Sebastián Piñera (2010), las investigaciones y
trabajos al respecto están un tanto detenidos, lo que también
retrasa el envío de información a Uruguay. Este tipo de trabajos de
cooperación se realiza desde hace varios años con Argentina y se
busca fortalecerlo con Brasil.
COMCOSUR AL DÍA / 30.03.12
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BRASIL: ESCRACHES CONTRA REPRESORES
En siete estados de Brasil un movimiento juvenil organizó escraches
contra represores de la dictadura.
Andrea Martínez (La Diaria)
Organizaciones sociales y activistas se unieron a lo largo de Brasil
en ciudades como Porto Alegre, San Pablo, Río de Janeiro o Aracaju
para denunciar públicamente a personas identificadas como autores de
violaciones a los derechos humanos durante la dictadura. Quieren que
el respaldo a la Comisión de la Verdad gane visibilidad ante las
recientes críticas de militares retirados.
Las acciones empezaron el lunes, en Belo Horizonte, capital del estado
de Minas Gerais, cuando unas 70 personas se reunieron en la puerta de
la casa de Ariovaldo da Hora e Silva con carteles, pancartas, tambores
y megáfonos. El movimiento Levante Popular de la Juventud coordinó a
organizaciones civiles para llevar a cabo escraches en siete ciudades
con el objetivo de que todos sepan quiénes son las personas que
secuestraron, torturaron, violaron y asesinaron durante la dictadura.
“No sabía que el señor Ari era un torturador. Tengo en la familia
un caso de perseguido por la dictadura y voy a divulgar esto”, dijo
un vecino de Da Hora e Silva al portal Vermelho.
Da Hora e Silva fue delegado de la Policía Civil durante la dictadura
y ejerció actividades en el Departamento de Orden Político y Social
(DOPS), encargado de la represión de movimientos contrarios al
régimen en Minas Gerais. Según declaraciones de víctimas y
familiares, fue responsable de la muerte de João Lucas Alves,
militante del Comando de Liberación Nacional (Colina).
Otro de los escraches apuntó a Davis dos Santos Araújo, también
parte del DOPS durante la dictadura. Según el Ministerio Público,
Dos Santos torturó a varios prisioneros políticos, entre ellos
Joaquim Alencar Seixas, dirigente del Movimiento Revolucionario
Tiradentes, que murió mientras lo torturaban. En volantes repartidos
durante la manifestación se señaló a Dos Santos como responsable de
varias desapariciones forzadas y de robo de niños que nacieron en
cautiverio. Actualmente es dueño de la empresa de seguridad privada
Dacala y sus dos sucursales, en San Pablo y Río de Janeiro, fueron
escenario del escrache.
En Porto Alegre la manifestación se convocó frente a la casa del
coronel Carlos Alberto Ponzi, ex jefe del Servicio Nacional de
Informaciones, uno de los 13 brasileños acusados por la Justicia
italiana por la desaparición del militante Lorenzo Ismael Viñas, en
1980.
En Fortaleza se hizo un escrache al ex delegado de la Policía Federal
José Armando Costa, quien según los testimonios de presos políticos
que sobrevivieron, era el encargado de recoger declaraciones falsas de
los detenidos después de las sesiones de tortura. En Curitiba se hizo
una única manifestación en la que se publicitaron los nombres de
varios torturadores que viven en la zona. Por otra parte, en Aracaju
(en el estado de Sergipe), se hizo una representación de una sesión
de tortura frente a un hospital en cuyo directorio está el médico
José Carlos Pinheiro, sospechoso de atender a las víctimas después
de ser torturadas. Belém fue también centro de escrache, en este
caso contra Adriano Bessa Ferreira, que es sospechoso de haber
colaborado con la dictadura infiltrándose en ciertos ambientes para
luego delatar actividades de opositores.
Participaron en los escraches grupos de 100 o 150 personas, en su
mayoría jóvenes, que llegaban al lugar distribuyendo volantes y se
quedaban allí entre una y dos horas para luego retirarse dejando
algún graffiti sobre la vereda o la calle con leyendas como “aquí
vive un torturador”.
Según el comunicado que enviaron a los medios de comunicación, los
escraches, que continuarán en los próximos meses, buscan mostrar que
la sociedad está organizada y que respalda a la Comisión de la
Verdad, a la que describen como un intento del gobierno de
responsabilizar a quienes cometieron violaciones a los derechos
humanos durante la dictadura. También buscan que el respaldo a la
comisión gane visibilidad ante las críticas realizadas en los
últimos meses por grupos de militares retirados.
COMCOSUR AL DÍA / 30.03.12
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