Montevideo
portal.
MARCHAN EN PARAGUAY EN REPUDIO DE REPATRIACIÓN DE RESTOS DE STROESSNER
El regreso del monstruo
02.11.2012
19:59
·
·
Cientos de víctimas de la dictadura paraguaya marcharon en
Asunción en repudio de la repatriación de restos de Alfredo Stroessner.
Centenares
de víctimas de la dictadura paraguaya de Alfredo Stroessner (1954-198/89)
manifestaron este viernes en repudio a la repatriación de los restos del ex
gobernante desde Brasilia y reclamaron el castigo de jerarcas del régimen
acusados de delitos de lesa humanidad.
Con
pancartas de "Nunca más Stroessner"y "Dictadura nunca más",
ex presos políticos paraguayos se concentraron frente al céntrico Panteón
Nacional de los Héroes para rechazar la anunciada repatriación por familiares y
allegados al extinto dictador.
Organizaciones
de derechos humanos calculan en alrededor de medio millar los asesinados
durante la dictadura y en 3.000 los desaparecidos, además de unos 20.000
exiliados.
Tras su
derrocamiento en febrero de 1989, Alfredo Stroessner se asiló en Brasil, en
donde falleció el 16 de agosto de 2006.
Durante
la concentración, los manifestantes relataron los vejámenes de que fueron
objeto en las prisiones paraguayas en tiempos del exdictador y denunciaron que
varios de sus "verdugos" siguen libres e impunes por desidia de la
justicia paraguaya.
"Tenemos
sed de justicia", dijo el defensor de derechos humanos Martín Almada, uno
de los organizadores de la movilización.
Almada,
un docente que fue detenido y torturado durante el régimen de Stroessner, dijo
que la falta de justicia "es lo que mantiene dividida a la sociedad"
paraguaya.
Fuente:
AFP
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ULTIMA HORA.COM
Stroessner y la memoria
Por Miguel H. López – En TW: @miguelhache
Solemos decir con frecuencia que los paraguayos somos de memoria frágil. Por lo general lo expresamos así para intentar explicar por qué suceden tantas barbaridades, preferentemente en el ámbito político y en el manejo del Estado.
Sin embargo, esa "desmemoria" no siempre es real, sino es simple complicidad.
Con el anuncio de la intención de repatriar los restos del dictador Stroessner (1954–1989) el día de su cumpleaños (3 de noviembre), tenemos una muestra clara de que el olvido no es la razón, sino lo es la acción de los prepotentes de siempre que pretenden aprovecharse de las coyunturas para acometer acciones como esta.
Si hubiera memoria frágil, no tendríamos las reacciones que se vienen dando, muy a pesar de los defensores del criminal régimen stronista.
Lo que está pasando nos da elementos interesantes para entender que este tipo de anuncios no hubieran sido posibles bajo un régimen de fuerte institucionalidad democrática. Dicho de otro modo, es la coyuntura de un gobierno de facto, con rebrote notorio de stronismo, el principal caldo de cultivo para alimentar "el coraje" de los nostálgicos de la dictadura (que no son pocos). Si esto no fuera verdad, por lo menos el que ocupa el Ejecutivo ya hubiera tomado alguna posición. Su silencio es, como mínimo, cómplice.
El retorno de los restos del tirano, anunciado por el nieto predilecto, reinstala la indignación. No es que no tenga derecho a ser repatriado, sino que su presencia será, por un lado, una afrenta a por lo menos las 459 víctimas de desaparición forzada y ejecuciones extrajudiciales, 19.862 personas detenidas arbitrariamente, 18.772 torturados, 236 niños y niñas privados de su libertad, 17 niños nacidos en prisión, 20.814 exiliados políticos, 126 paraguayos desaparecidos en el Operativo Cóndor y un total de 128.076 víctimas directas e indirectas, sin hablar del resto de la población cuyos derechos fueron sistemáticamente conculcados.
Por otro lado, aparte de constituir una provocación, pretende ser una aleve reivindicación de la figura del tirano y en ella de su gobierno de opresión, saqueo y crímenes de lesa humanidad.
Mucho de lo que pasa en el país, la herencia de nefastos políticos y gobernantes, la corrupción enfermiza, el estelionato, el cohecho, el cercenamiento cívico,la
Justicia venal, etc., es consecuencia de aquellos casi 35
años de dictadura sangrienta.
Como decía el poeta uruguayo, Mario Benedetti, "el olvido está lleno de memorias"; y porque no puede haber olvido de lo que nunca existió y la dictadura de Stroessner duró más de 3 décadas en medio de la adulonería, la miseria y el terror, aunque recuerdos extraviados, no se invalida la crueldad de lo ocurrido.
El dictador reinó sobre la vida, el dolor y la sangre de cientos de miles de compatriotas. Reivindicarlo es entronizar la muerte.
Solemos decir con frecuencia que los paraguayos somos de memoria frágil. Por lo general lo expresamos así para intentar explicar por qué suceden tantas barbaridades, preferentemente en el ámbito político y en el manejo del Estado.
Sin embargo, esa "desmemoria" no siempre es real, sino es simple complicidad.
Con el anuncio de la intención de repatriar los restos del dictador Stroessner (1954–1989) el día de su cumpleaños (3 de noviembre), tenemos una muestra clara de que el olvido no es la razón, sino lo es la acción de los prepotentes de siempre que pretenden aprovecharse de las coyunturas para acometer acciones como esta.
Si hubiera memoria frágil, no tendríamos las reacciones que se vienen dando, muy a pesar de los defensores del criminal régimen stronista.
Lo que está pasando nos da elementos interesantes para entender que este tipo de anuncios no hubieran sido posibles bajo un régimen de fuerte institucionalidad democrática. Dicho de otro modo, es la coyuntura de un gobierno de facto, con rebrote notorio de stronismo, el principal caldo de cultivo para alimentar "el coraje" de los nostálgicos de la dictadura (que no son pocos). Si esto no fuera verdad, por lo menos el que ocupa el Ejecutivo ya hubiera tomado alguna posición. Su silencio es, como mínimo, cómplice.
El retorno de los restos del tirano, anunciado por el nieto predilecto, reinstala la indignación. No es que no tenga derecho a ser repatriado, sino que su presencia será, por un lado, una afrenta a por lo menos las 459 víctimas de desaparición forzada y ejecuciones extrajudiciales, 19.862 personas detenidas arbitrariamente, 18.772 torturados, 236 niños y niñas privados de su libertad, 17 niños nacidos en prisión, 20.814 exiliados políticos, 126 paraguayos desaparecidos en el Operativo Cóndor y un total de 128.076 víctimas directas e indirectas, sin hablar del resto de la población cuyos derechos fueron sistemáticamente conculcados.
Por otro lado, aparte de constituir una provocación, pretende ser una aleve reivindicación de la figura del tirano y en ella de su gobierno de opresión, saqueo y crímenes de lesa humanidad.
Mucho de lo que pasa en el país, la herencia de nefastos políticos y gobernantes, la corrupción enfermiza, el estelionato, el cohecho, el cercenamiento cívico,
Como decía el poeta uruguayo, Mario Benedetti, "el olvido está lleno de memorias"; y porque no puede haber olvido de lo que nunca existió y la dictadura de Stroessner duró más de 3 décadas en medio de la adulonería, la miseria y el terror, aunque recuerdos extraviados, no se invalida la crueldad de lo ocurrido.
El dictador reinó sobre la vida, el dolor y la sangre de cientos de miles de compatriotas. Reivindicarlo es entronizar la muerte.
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